martes, 21 de mayo de 2024

EL TALLER DEL ESPARTO

Taller del esparto en el Ecomuseo

 

Los pueblos con cultura conservan sus tradiciones




El 21 de abril pasado le escribí a Montse Navarro, la concejala de Turismo, este mensaje: Juan de Dios Fernández hace artesanía del esparto, tiene 90 años y cuando fallezca ese tesoro se habrá perdido. Podía dar algún curso del esparto a los jóvenes en el Ecomuseo o en otro sitio, y no os supone nada. En Galera exponen la artesanía del esparto en la feria de Agosto.
El tres de mayo, la página de Facebook del Ayuntamiento de Castilléjar anunciaba: TALLER DE APRENDIZAJE DE ESPARTO. Desde el Ayuntamiento se pretende incentivar la recuperación de las costumbres y tradiciones de nuestro pueblo. Para tal motivo se van a organizar unos talleres de convivencia con nuestros mayores y todas aquellas personas interesadas en aprender el oficio del esparto.
El trece de mayo, en la citada página se leía: En la pasada reunión realizada el jueves, se acordó que el taller de aprendizaje del esparto se realizará todos los martes y jueves a las 20:00 horas, en el Ecomuseo de Castilléjar. Desde el Ayuntamiento queremos animar a todas aquellas personas que estén interesadas en aprender cómo a aquellas que ya sepan a participar en estas jornadas de convivencia.



 Y dos días después, una foto con el maestro y ocho alumnos, venía con este texto: Primer día del taller de esparto, la cosa promete. El próximo jueves a las 20 horas más. Invitados quedáis.
Esta publicación le gustó a 97 personas, fue nueve veces compartida y tuvo estos comentarios:
Ivon Tesselaar. Jueves a las 8... ¿pero, dónde?
Maricarmen Ordóñez V. Muy bien mi suegro lo hacía y no pude aprender a hacerlo
Hermi Fernández M. Hola, buenas tardes, el maestro es mi padre, esas manos viejitas, que le faltan unos días para cumplir los 90, me ha emocionado verlo, aquí tendré un recuerdo vivo. Qué impresión me ha causado verlo con los espartos en las manos y en la boca, animo a todos, seguro que aprendéis siempre quedan cosas que aprender, un saludo a todos y para mi padre, Juan de Dios. Un beso muy grande, de su hija Hermi.
María Fresneda.  Tengo el placer de tener un soplillo que me regaló un día que estuve en vuestra casa, y ver bastantes trabajos realizados por él muy bonitos… Que no decaiga este oficio, olé a éstos participantes y que sigamos sumando, muy buena iniciativa.
Ángeles Frábrega H.  ¡Muy buena iniciativa!
José Correa S. Me parece una iniciativa perfecta, pero antiguamente la escuela del esparto estaba en la calle, por los puntales y en cualquier rincón del pueblo y había grandes profesores y alguna profesora destacada como era la Tía Grilla, que ella sola hacia todas las cuerdas de la plaza de los toros en la feria. D.E.P.
Sagrario Pedrosa. Doy fe, como nieta de la Tía Grilla, gran mujer y mejor abuela. D.e.p.
Leandro García C. El esparto dio de comer a muchas familias y el aprendizaje es una tradición que no se pierde.

Los Barrancos, desde Los Evangelistas


El 20 de abril me pasé por la casa de Juan de Dios y estuvimos hablando sobre la artesanía que hace con el esparto y que cuelga de las paredes de su casa, así que tomé algunas fotos: una espuerta, una guitarra, unas esparteñas, soplillos de varios tamaños, hasta un burro con aguaderas y cántaros... Era una pena que el maestro Juan de Dios se marchara sin transmitir esa sabiduría, que va tejiendo con sus manos, a las nuevas generaciones de castillejanos y que todo quedara en el olvido. ¡Demasiadas cosas se han perdido ya en Castilleja, por dejadez o desidia! Sin embargo, me alegro de que en el Ayuntamiento se hayan dado cuenta de la importancia de la artesanía del esparto, que apenas si existe en contados pueblos, y de que las atochas de los Barrancos fueron el sustento de cientos de familias durante muchos años. Al menos la tradición ya no se pierde. Ahora lo que hace falta es que le erijan una estatua al espartero en Castilleja de los Ríos, pero esto deben de pedirlo los antiguos esparteros y los hijos de ellos, porque es de justicia.

Solo queda añadir que la concejala, Montse Navarro, y el Ecomuseo también anunciaron el taller del esparto en sus páginas de Facebook

Artesanía del esparto, de Juan de Dios Fernández
 

viernes, 17 de mayo de 2024

CARTA AL PRESIDENTE DEL ‘CENTRO DE ESTUDIOS PEDRO SUÁREZ’




 Estimado presidente, como miembro del CEPS, le expongo lo que sigue:

El 3 de mayo pasado, en un correo electrónico a los miembros, usted escribe: “Este nuevo Plan de Igualdad fue aprobado en la última junta de gobierno, y se somete ahora a la consideración del resto de miembros de Centro de Estudios para que nos hagan llegar sus sugerencias, alegaciones y/o enmiendas hasta el 15 de mayo próximo”.

No se entiende por qué usted no lo somete a votación de la asamblea, en vez de tomar a los miembros como convidados de piedra, como suele hacer por costumbre. ¿Acaso teme que le rechacen el plan?

 

En su JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS del II Plan de Igualdad (de once páginas), escribe: “El Centro de Estudios Pedro Suárez (CEPS) no está obligado por la Ley a disponer de un Plan de Igualdad ya que éste, como se ha dicho, es necesario a partir  de  una  plantilla  de  250  empleados/as.  El  interés  por  hacerlo  se  sustenta, pues,  en  la  sensibilidad  y  en  la  voluntad  de  dotar  a  la  entidad  de  códigos igualitarios, solidarios, justos y sostenibles. A  través  de  este  II  Plan  de  Igualdad,  el  CEPS  quiere  impulsar  todos  los mecanismos y herramientas necesarias que culminen con la no discriminación por motivos  de  género  y  una  igualdad  real  en  todas  las  áreas  y  niveles  de  la organización”.

Usted reconoce que “no está obligado por la Ley a disponer de un Plan de Igualdad”, entonces debería explicarnos, ¿por qué motivos quiere imponerlo en el CEPS, por la puerta de atrás? Apelando a la democracia, lo lógico es convocar una asamblea, debatirlo y finalmente votarlo. El artículo 7 de la Constitución establece que la estructura interna y funcionamiento de las asociaciones deberán ser democráticos.

 

El 24 de marzo de 2023 le contesté a usted, en relación a los cuatro informes de valoración sobre mi trabajo El castillo y las cuevas de la Morería, que envié para su publicación en el Boletín, pero fue rechazado.

Este cuarto informe de última hora tiene fecha de recepción el 10/03/2023, precisamente el mismo día que te envié la reclamación por correo electrónico, por lo que resulta chocante la coincidencia de fechas. Copio casi íntegras las observaciones el evaluador: En mi modesta opinión, este trabajo no presenta los requisitos mínimos para su publicación en el boletín del CEPS. En todo caso se trata de un artículo, nada riguroso e incoherente, propio de un blog informal o de un texto de memorias personales a la baja. Hay afirmaciones sin respaldo bibliográfico, no presenta fuentes primarias (pero no especifica), ni notas a pie de página (hay dos, habrá que pensar si ha leído el trabajo). (…). Este amago de artículo pseudo periodístico no aporta ningún valor en el conocimiento científico del patrimonio. Las citas textuales sobre comentarios en las redes sociales y las declaraciones de los políticos locales demuestran que se trata de un género de trabajo inclasificable… Son realmente sorprendentes los ataques personales y las expresiones despectivas, zafias y fuera de lugar que utiliza el evaluador, lejos de  la imparcialidad, objetividad y seriedad que deben tener los informes. La pregunta es: ¿son estos los informes que utiliza el Boletín para rechazar los trabajos de los miembros?”.

Mi pregunta es: ¿Los insultos y el trato indigno a los miembros por parte de los evaluadores, que usted designa a dedo, forman también parte del II Plan de Igualdad? Lo cierto es que no hay concordancia entre las prácticas abusivas (por decirlo de forma suave) y la igualdad  real  que nos promete.

 

Copio estos párrafos que publiqué en mi blog  el 8 de septiembre de 2023, titulado Los amigos de don José Manuel.

“En el Boletín número 33, de 2020, vienen 11 artículos de miembros y 19 de investigadores, o lo que sean, ajenos al CEPS. Y en el Boletín número 35, de 2022, vienen 23 trabajos: 8 son de miembros del CEPS, mientras que los 15 restantes (casi el doble) son de personas ajenas. Y en este plan, a unos les sirve para hacer méritos académicos y al presidente para hacer amistades por el mundo y prodigarse en los medios. En mi escrito, le recuerdo al presidente que algunos trabajos ajenos no cumplen con los criterios y los aspectos relevantes que exigen las Normas de presentación. Sin embargo, les aplican una doble vara de medir. Nada de extraño tiene que haya mucho descontento entre los compañeros del CEPS: se quejan porque en los últimos años se han elevado inexplicablemente las exigencias de manera que no les publican los trabajos. Como dice un compañero, ¿de qué nos sirve celebrar nuestro treinta y cinco aniversario, cuando se excluyen a los miembros en favor de otros? Seguro que ellos, no tienen problemas para publicar (…).Y así, unos y otros se van desengañando”.

Habría que preguntarle al presidente: ¿el II Plan de Igualdad reza también para las publicaciones de los miembros en el Boletín del CEPS?

 El pasado 12 de febrero, le envié a usted este mensaje por correo electrónico, pero no obtuve contestación: “El CEPS es una asociación que trabaja por la investigación, conservación y difusión del patrimonio cultural de las comarcas de Guadix, Baza y Huéscar”, de esta forma se anuncia en su página de Facebook y en sus estatutos. Por tanto, debe de regirse por las reglas que establece la Real Academia Española de la Lengua y no por la doctrina sobre la lengua que quiere imponer el Gobierno. Mi pregunta es si, como presidente del CEPS, ha impuesto ya el lenguaje inclusivo sin consultarlo siquiera a los miembros ni someterlo a votación en asamblea.  En el correo electrónico que nos dirige a todos los miembros, el 9 de febrero,  para que rellenemos el formulario, termina así: “Una vez culminado el periodo de aplicación del I Plan de Igualdad del Centro de Estudios Pedro Suárez (CEPS) corresponde medir el impacto de las actuaciones implementadas, mediante este cuestionario dirigido a las socias y socios”. Quiero recordarle que mi último trabajo de investigación no llegó a publicarse en el Boletín del CEPS porque tres evaluadores anónimos alegaron sin fundamento alguno que no se atenía a las normas de publicación, mientras se publicaban sin reparos los trabajos de otros que las incumplían claramente, como le indicaba en mi reclamación. Y sin embargo, en la encuesta que le dirige ahora a los miembros del CEPS se permite el lujo de incumplir las normas de la lengua española que establece la RAE, utilizando el lenguaje inclusivo. Sobra decir que la lengua española es patrimonio cultural de todos los españoles, por lo que debemos conservarla y difundirla respetando las normas de la Academia de la Lengua, y usted debería de ser el primero en dar ejemplo. Atentamente”.

Creo que usted está mezclando la ideología con la conservación del patrimonio cultural y la historia de las citadas comarcas, intentando imponer a los miembros del Centro su doctrina.

 El historiador Antonio Domínguez Ortiz dejó escrito que “el historiador debe ser como el notario que levanta acta del pasado, y no como esos intérpretes sectarios que se arriman al sol que más calienta”. Ahora, por razones ideológicas, se intenta imponer a los miembros del CEPS el lenguaje inclusivo, cuando nuestra obligación como historiadores y cronistas es respetar las normas de la Academia de la Lengua (¡qué menos!) y conservar tanto el patrimonio cultural como la lengua española. Por tanto, como presidente, debe respetar la libertad ideológica de los miembros del CEPS, como establece el artículo 16 de la Constitución española, y dejar el lenguaje inclusivo para los políticos. Atentamente, lo saluda.

17 de mayo de 2024

 Leandro García Casanova

 

miércoles, 15 de mayo de 2024

SEÑALES DE TRÁFICO

 

Enorme socavón en la calle Murillo





El 30 de abril pasado, registré una solicitud en el Ayuntamiento de Las Gabias, con este texto: Hay un socavón, entre la calle Murillo y Cuesta Blanquilla, en medio  del asfalto, de unos 50 cm de lado y de 5 o 6 cm de profundidad. Desde hace más de un mes, un vecino lo rellenó de arena pero no ha servido de nada. El socavón todavía sigue ahí y se ha agrandado, ni siquiera han colocado una señal o una valla de protección. ¿Para qué? Precisamente en este punto, un cruce de calles bastante transitado, han ocurrido varios accidentes de tráfico.


Calle Velázquez carece de señales de ceda el paso

El 24 de enero dirigí otra petición al ayuntamiento, alegando que las calles Juan XIII, Velázquez, Murillo y otra, que  confluyen en la Avenida de San Marcos, carecen de la señal de ‘ceda al paso’, de manera que a veces cruzan los vehículos con el riesgo de colisionar. Sería conveniente que en las citadas calles se colocaran las señales de ceda al paso. Dos semanas después me llamaron del ayuntamiento, creo que de Urbanismo, diciendo que me aceptaban la petición pero esto va para largo. Hay que decir que las calles adyacentes tienen el ceda el paso correspondiente, pero estas carecen de la señal. 

Calle Murillo



Las calles del barrio son de dirección única mientras que la calle Murillo, que conecta con la Cuesta Blanquilla, es de doble dirección y aquello sigue abandonado de la mano de Dios y con el riesgo de accidentes







La Cuesta Blanquilla también es de doble dirección, pero con el agravante de que carece de señales de aparcamiento por quincenas, por lo que los vehículos aparcan a ambos lados de la calle. Pero cuando los conductores  llegamos a la curva (donde también están colocados los contenedores de basura), no sabemos lo que nos vamos a encontrar de frente. Es lo que se dice un punto negro.

Hace varios años publiqué en Facebook que, al final de la calle Murillo con la salida que da a la calle Real de Málaga, carecía de la señal de ceda el paso, por lo que había riesgo de colisión entre los vehículos que subían y bajaban. El concejal de Urbanismo de entonces se interesó y me contestó por Facebook, y unas semanas después habían colocado la señal de ceda el paso. Es evidente que algo está fallando. 

domingo, 12 de mayo de 2024

CARTAS DE ADELA

 



El 25,8% de defunciones en España, en 2022, se debieron a tumores



Queridas personas de este maravilloso mundo invisible a los ojos de muchos. Mi nombre es Adela y tengo cáncer. A mis casi 19 años de edad no puedo quejarme, puedo decir que valoro la vida, he aprendido a quererme y a disfrutar de las pequeñas cosas que la gente suele pasar por alto. El cáncer me cambió la vida. Pasé por la fase de negación, donde a los 17 años de edad quise que me emanciparan para negarme a recibir tratamiento médico. Después llegó la fase de aceptación, que me duró más o menos tres meses, donde no quería levantar cabeza, pues mi vida giraba en torno a mi cama: el no querer hablar con nadie y el dejarme hacer sin ser partícipe del tratamiento. Poco después de cumplir los 18 y de tener un cuadro difícil en casa, reaccioné y entré activamente a preocuparme por mi salud, por cada cosa que me hacían o cada propuesta nueva que me ofrecían.

Fueron cinco quimioterapias distintas, una de rescate, radioterapias con quemaduras graves que me llevaron a la UCI por una septicemia… Un ensayo clínico fallido en Navarra y un deseo inmediato de morir, al sentir que las fuerzas me faltaban. Hoy por hoy sigo en tratamiento, metida en un ensayo clínico en el que pocos confían, luchando por tener una vida que poco a poco veo más cerca. La teoría del cáncer se conoce: células tumorales que se multiplican de forma descontrolada y… bla, bla, bla. Eso lo sabe mucha gente. Pero lo que poca gente sabe es cómo se vive por dentro. El cáncer te va matando, tanto de forma literal, infectando cada parte de tu cuerpo, y también emocionalmente, cuando el miedo te invade: la muerte está presente en tus pensamientos cada día y el dolor de los tratamientos se hace insoportable. También está el dolor de ver sufrir a los que te rodean, ver como sufren tu misma batalla de una forma distinta pero igual de dolorosa.

Para saber qué siente una persona con cáncer tienes que sufrirlo, porque por muy bien que expliques el dolor o intentes hacérselo llegar a alguien, nunca entenderá la magnitud y fuerza con la que ataca hasta que lo vive. Por suerte yo tengo una amiga. Una amiga que hace suyo mi dolor y que forzosamente ha pasado de marearse con las agujas, a ponerme la morfina como si fuera una experta. Una amiga que ha pasado noches sin dormir por mí, que ha movido cielo y tierra para que yo esté bien cómoda y feliz, cuando los médicos me daban meses de vida. Una amiga que me ha levantado del suelo cuando me he caído (literalmente hablando) y que ha caminado por mí cuando los ánimos estaban en el suelo. Aún hoy sigue al pie del cañón, sin dejarme caer, y manteniéndome siempre positiva (nada fácil después de 15 meses con cáncer y decirme que estoy en fase terminal).

Sin ella sé que yo no estaría aquí para celebrar el Día Mundial del Cáncer. Sin ella sé que me habría hundido hace mucho tiempo en un pozo sin salida. Sin ella puedo decir que nada de esto tendría sentido, porque sin haber sufrido cáncer me ha mostrado las cosas buenas que tiene la vida (y creedme que son muchísimas). Como consejo para todos, os digo que valoréis cada pequeña cosa que tenéis porque esas cosas pequeñas son grandes cuando faltan. Yo no valoraba nada hasta que sentí que las perdía y por suerte sigo aquí para darles la importancia que merecen. El simple hecho de cerrar los ojos y sentir los rayos del Sol en la cara… El olor a playa una noche de primavera… O el simple abrazo, sin saber si será el último o no, de alguien a quien quieres. Valorad la vida porque la frase de que solo hay una es cierta. Y nosotros somos los que escribimos el final de nuestra historia. El final de mi historia todavía no está escrito pero el cuerpo, que es lo que da vida a la historia, sí, y lo estoy llenando de cosas buenas y bonitas. ¿Y a ti, te gusta el guion de tu vida?

   6 de febrero de 2017

 

Hospital de Vich



Buenas noticias. Buenas tardes, cáncer, te noto agotado. Yo también lo estoy, no sufras... Pero tranquilo, yo por mi parte sé que el miércoles ya estaré mucho mejor. Buenas noticias para mí con el tema de la medicación, aquí en el MD Anderson. Son unos cracs y gracias a su profesionalidad los efectos secundarios son mínimos. Ayer cuando llegué empezaron a ponerme de todo, ya no quiero ni preguntar para qué sirve cada ampolla que me ponen por el port-a-cath, pero sé que es para vómitos, dolor y mil efectos secundarios más que suelen tener estos tipos de tratamiento. Gracias a eso solo han sido unas siete horas de malestar y un poco de dolor, desde las 6:30 hasta las 13:00 horas que he empezado a encontrarme mejor. Y como no hay reacción alérgica ni nada por el estilo, me hacen la infusión más rápida y la acabo en 36 horas en lugar de las 48 que fueron la última vez, por lo que mañana a las 12 del mediodía termino y, si todo ha ido tan bien como hoy, podré irme a las tres para casa, que en helicóptero son unos 40 minutos aproximadamente.

De ánimo, desde ayer que hablé con E y lloré mucho, estoy muchísimo mejor. Es como si me hubiera sacado un enorme peso de encima y hubiera hecho un reinicio. Como volver a empezar de nuevo, partiendo desde un cansancio lógico y normal, pero con el vaso vacío. Ahora sé que queda mucho para que el vaso vuelva a colmarse y que vuelva a estar como estuve, y también he aprendido que mejor no esperaré a que se haga añicos el vaso, sino que cuando rebose quitaré todo el agua desde un principio sin esperar a ver cuánto aguanto. Pero sí, creo que estoy mucho mejor que tú, cáncer. Me duele la cabeza pero lo asocio al llanto de ayer. Y el cansancio creo que también es normal porque ayer, entre el llorar hasta las tantas y el despertarme a las seis y media..., juegan un papel importante. Voy a ver un poco la televisión y luego quizá pinte un poco mientras traen la cena. La calma ha vuelto de nuevo, vuelvo a sentir la tranquilidad y el optimismo vuelve a mí...

… 5 de abril de 2017


 Hace unos días, le escribí a la amiga que me proporcionó estas cartas: De casualidad he encontrado las cartas, ¿sabes si Adela se curó del cáncer? Y me responde: Sí, del todo, solo sé que estaba trabajando y vivía en un apartamento.

 

Posdata: El nombre de la autora es ficticio pero las cartas son auténticas.

domingo, 5 de mayo de 2024

FIESTAS DE LA CRUZ, EN LOS EVANGELISTAS

 

Los Evangelistas, con los Barrancos al fondo




Ayer me pasé por el barrio de Los Evangelistas (Castilléjar), que estos días celebra las Fiestas de la Cruz, pues desde hace años tenía ganas de ir. Sobre las 11 horas se celebró el concurso de tirachinas, donde había que tirar diez canicas sobre unas bombillas coloreadas. Hubo 16 participantes, yo también participé, y se llevó el premio de 50 euros más el trofeo, Ángel Pinteño. Mientras que en infantil hubo solamente dos participantes. A ver si se animan porque el tirachinas requiere de poca tecnología. En la Plaza de los Evangelistas se celebró el Mercado Medieval, con varios puestos de artesanía, la mayoría eran de ingleses. A las 14 horas tuvo lugar la comida, Migas a 2 euros el plato, rezaba el programa de fiestas. Aquello se llenó de gente y el personal salió contento de las migas con tropezones. Después la charanga estuvo tocando toda la tarde. Pongo también fotos de algunas cruces, no las vi todas, así como de los bellos paisajes que se observan desde este singular barrio. El Ayuntamiento podía colaborar en las fiestas de Los Evangelistas, pues no reciben ninguna subvención y todo sale del bolsillo de los vecinos. ¡Qué menos que ver a un concejal por el barrio saludando a los vecinos! El próximo año, Dios mediante, espero ir a la procesión de la Santa Cruz. Para hoy el programa anuncia un buen arroz a las 14 horas y la procesión a las 20.

Posdata. Ayer un vecino me comentó que el Ayuntamiento no daba ninguna ayuda para la fiesta de la Cruz y lo creí, cuando tenía que haberlo confirmado. Pero esta noche un vecino me ha llamado para decirme que el alcalde y las concejalas de Cultura y de Turismo se han pasado por la fiesta de Los Evangelistas, y que el Ayuntamiento da mil euros para la fiesta. Mis disculpas por el error. 

El concurso de tirachinas

El ganador, Antonio Pinteño





Lista de participantes y puntuación


Cortijo del Búho, Benamaurel

Puestos del Mercado Medieval
La barra del bar
Con faldas y a lo loco

La charanga
El comedor se llenó
Al fondo, la Cruz Misionera

Una cruz, con la vega y Jabalcón al fono

Otras cruces




miércoles, 1 de mayo de 2024

LOS EVANGELISTAS, AÑOS SESENTA

 





Esta imagen abarca gran parte de Los Evangelistas, a la izquierda se ve el camino que conduce a la Cruz Misionera y al Cementerio Municipal. Habrá una decena de casas y el resto son cuevas, con las eras y algunos almiares. También se puede apreciar lo pequeña que era la escuela para los niños, en comparación con las casas próximas.

Del libro Leandro: Castilleja de los Ríos en blanco y negro. Edición de autor, 2020. Se vende en el Ecomuseo y en el estanco, a 10 euros.